Hojas de Hierba
(Danza y Poesía Vivencial)
OBJETIVOS
«Impulso. Impulso. Siempre el creador impulso del mundo» (W.Whitman)
El “Espontáneo yo” (en tú, lo común, ello…) desde la Danza Vivencial. Un leit-motiv (en este caso: el texto literario de un autor con temática universal y atemporal como Walt Whitman) puede ser hilo conductor donde explorar recursos transformadores (para el Desarrollo Personal, Cultural, Artístico y el motor Educativo). Ensanchando la Creatividad, ahondar en el Auto-Mutuo-Conocimiento.
La consciente celebración de un Yo vital y democrático en la multiplicidad del don poético, inherente a todo ser humano (en el habla, así como en el cuerpo).
CONTENIDOS
«Soy el poeta el Cuerpo y soy el poeta del Alma,
los goces del cielo están conmigo
y los tormentos del infierno están conmigo.
Los primeros los multiplico e injerto en mi ser,
los últimos los traduzco a un nuevo idioma»
Movimientos Espontáneos vinculan lo interno con lo externo.
Escritura libre, Escucha activa, Danza orgánica, Tacto consciente, Juego, Inspiración, Declamación, Composición…
La obra “Hojas de Hierba” brinda pistas tras las que resonar, despertar o morar en el valor de “Ser Humano”. La energía natural del cuerpo -con alas propias- desentraña poesías del alma. El impulso creador “explora el espacio vacío circundante” (Whitman), “El Arte sucede” (Whistler) y uno puede expresar “la más grande de todas las maravillas”.
“Ni yo ni nadie puede recorrer ese camino por ti.
Habrás de recorrerlo tú mismo.
No está lejos. Está al alcance.
Tal vez has andado sobre él desde
tu nacimiento, sin saberlo.
Tal vez está en todas partes, en el agua y en la tierra.”
Hace 200 años nació alguien que se anticipó a los descubrimientos neurocientíficos actuales, un maestro visionario, autor arquetípico, reunificador, cantor de lo marginal a lo universal… un revolucionario: el hombre poético que saborea la pluralidad en un poema inmenso que abarca cuerpo y alma, un espejo en el cual el lector activo -durante generaciones y generaciones – puede verse reflejado, libre y entero… Un Whitman que perdura (al igual que Homero o Shakespeare) entre nosotros, en una obra unificada -desde la flor de la mente- integrando el todo inseparable que somos:
«Búscame bajo la suela de tus zapatos / Apenas podrás saber quién soy o qué quiero decir /No obstante será saludable para ti / y purificaré y vigorizaré tu sangre»
«Aprenderás a escuchar en todas las direcciones
y dejarás que la esencia del universo se filtre por tu ser»